viernes, 1 de junio de 2007

MASTERS OF HORROR: Segunda temporada (I)

(La primera temporada ya la comenté aquí y aquí)

THE DAMNED THING (Tobe Hooper)
Cualquier cosa más o menos apocalíptica, ya de arranque, tiene ganado el cielo. Más cuando hay una sana intención de meczclotarlo con proto-horrores de Dunwich vía Ambrose Bierce. Tobe Hooper, ya lo he dicho aquí, es un director de cine nato porque le sale todo sin quererlo. No me lo imagino pensando "encuádrame bien aquí", "esos focos más arriba", sino fumándose un puro en su silla de director con una botella de cerveza y dando indicaciones haciendo muchos gestos y hablando como en una reunión de amigos. Y que sea lo que tenga que ser. Hay una investigación creo, y si no es así da igual, lo vi hace tiempo y es lo de menos. Lo de más es que hay un disparo en tripa que da gusto verlo, Ted Raimi de cura pero no gamberrete, y hay una sensación general de desagradable humedad que le da el toque justo. El justo.

FAMILY (John Landis)
Hablando de gordos, el mejor es George Wendt. Porque tiene, como John Goodman, pinta de ser un cuñado borrachín entretenedor nato, pero sin el punto de maltratador en potencia que sí que tiene el otro. Y ver a un obeso bonachón psicópata es algo que desde luego apetece siempre. John Landis es un tipo muy listo, que lo único que quiere es pasarlo bien, y de paso que la gente lo pase bien. Recomendaciones para el creador: mueve la cámara de forma elegante, usa música simpática de los padres de nuestros padres, que haya buen rollo a lo desfile de Ferris Bueller. Mucho sol dominguero. Cuando haya alegría y sonrisa, entonces metes el odorama de cuerpos putrefactos en plan y plano chocante. Otra recomendación no seguida es que sean pútridos más de maquillaje que de infografía, pero no se puede tener todo. El caso es que las zonas residenciales dan mucho juego para el terror sencillito y de pasar la tarde, y Landis lo aprovecha con todo su humor negrísimo, con su carga de crítica social tan implícita en el escenario que no hace falta ni pensarla. Por si acaso, el final la pone sobre el tapete. El viejo truco de poner una escena que mira cómo impacta que luego resulta que está en la mente del personaje a Landis le sale muy bien; hizo de ello el único interés de la entrañable directa-a-vídeo "Susan's Plan". Aquí añade diversión y le da dinamismo al asunto. Para que se me entienda: que muy recomendable.


THE V WORD (Ernest R. Dickerson)
La sorpresa de la temporada. Porque dime tú quién se iba a imaginar que una historia de vampiros, escrita por Mick Garris y dirigida por un tipo que no se sabe, quién se iba a imaginar que no iba a ser un burdo coñazo, además de ramillete de tópicos. Pues no lo es, porque en la primera mitad el tal Dickerson demuestra un dominio total del crear ambiente, paseándose por un tenebroso tanatorio en el que tienes la sensación de que te van a gritar "Inocente, inocente" pero no te consigues quitar el nudo de la garganta. Y que no pasa nada en media hora, pero tiene un algo de oscuridad que entra con vaselina que la hace funcionar la mar de bien, casi como un Argento de barrio acomodado. Luego salen del sitio y, sin cristaleras de colores, pues se abandona inevitablemente la atmósfera. Aun así, el resto es muy digno, con Michael Ironside y un regustico ochentero.

SOUNDS LIKE (Brad Anderson)
El Anderson éste es un listo de cuidado, o más bien se lo cree. Lo digo desde la semiignorancia: "Session 9" era un rebufo soseras de la bruja de Blair, "El maquinista" no la he visto pero me atrevo a sospechar que basa toda su fuerza en el esfuerzo físico de Christian Bale. Brad Anderson hace cine de terror un poco pretencioso, como intentando huir un poco de lo evidente. "Miradme, estoy por encima de esta chusma con la que me emparentan". Hasta intenta dotar de humanidad a lo que ha rodado. Pero no tiene ni talento ni la suficiente inteligencia y se queda en tierra de nadie. Ni asusta, ni sorprende, ni entretiene ni na de na. Es un ensayo de "quiero hacer algo diferente" con la misma fuerza de un anuncio de sonotones.

1 comentario:

Anónimo dijo...

"The Damned Thing" me pareció una cosa muy caótica, muy desmembrada. Comienza de forma prometedora para luego ir perdiendo gas a marchas forzadas. No me gustó nada.

"The Family" es una gran broma de humor negro de lo más agradable. Una comunidad aparentemente feliz a pleno sol que se ve resquebrajada por gente (aparentemente) de buen rollo pero con un fondo enfermizo. El final se ve venir, pero bueno... no se puede tener todo. Landis es un calenturiento y un bromista. Está bien.

"The V World" comienza bien y su aproximación al vampirismo tiene chispa. El problemón es que en la parte final se cae por los suelos y se hunde en el tópico más sobado. Se estropea.

"Sounds Like" es interesante por el uso del sonido y el proceso de enloquecimiento de su protagonista, pero me molesta el hecho de que resulte TAN repetitivo y de desarrollo tan corto y predecible. Me decepcionó bastante porque Brad Anderson, que no es un chapucero, creo que apunta maneras (sobre todo estéticas) y aquí se queda cortito.